Es sábado, ya casi termina el mes y fue demasiado rápido como pasaron los días. Anteriormente, los días de los otros meses se iban lento y cada hora pareciera que se extendiera.
La lluvia se escucha a través de la ventana y el viento solo sopla fuerte como indicio de despedida.
Cómo es habitual por estos meses, cada fin de semana sin falta puedo disfrutar de la compañía de mi adorada prima, ella está ahora en sus asuntos mientras yo descaradamente me apropio de su cama.
Hoy este escrito es sencillo pero está cargando de muchas emociones especialmente porque no quiero olvidar algo que marcó esta semana, tuve una gran sorpresa gracias a la tecnología y en especial a WhatsApp que corta y por fortuna las distancias.
Nunca nadie para mí cantó una canción, tocó un instrumento y mucho menos dedicó una melodía. Todo esto es realmente nuevo para mi. Recuerdan el chico loco de la salsa de hace dos años...pues bien, la historia continúa después de tanto tiempo ¡Increíble! Y claro, hay muchas cosas por contar pero eso tomará tiempo y hacer un gran esfuerzo para que mi memoria refresque los recuerdos.
Ben, no sé si después de mucho tiempo seguiremos siendo amigos, si quizá llegará un momento en que decidas dejar de comunicarte conmigo pero hoy más que nunca estoy tan feliz y agradecida de encontrar y conservar tu presencia en mi vida.
Anhelo que algún día ojalá no muy lejano nos encontremos de nuevo y seguir diciendo "está historia continuará".
Solo puedo decir que cada persona que se cruce por nuestra vida atesoremos su presencia como especial tesoro y agradeciendo por lo que nos enseñan.
Estoy cansada físicamente del día pero mi espíritu y alma reconfortan este día frío y lluvioso.
Nos leeremos próximamente.